El término pseudoparkinsonismo se refiere a una alteración motora que parece un parkinsonismo (ver entrada) pero que es cualitativamente diferente y no es el resultado de una patología de los ganglios de la base. Estas alteraciones motoras se deben a una alteración difusa cortical.
Las situaciones clínicas que más se confunden son las siguientes: la apraxia ideomotora con la bradicinesia, la rigidez paratónica con la rigidez parkinsoniana y el trastorno frontal de la marcha con la marcha parkinsoniana.
En esta entrada comentaré la apraxia ideomotora que se puede confundir con la bradicinesia que comenté en otra entrada.
Apraxia ideomotora
La apraxia es el deterioro en la realización de actos motores a pesar de tener las funciones neurológicas primarias intactas, es decir, a pesar de mantener intacta la comprensión de la tarea a realizar, la fuerza muscular, la sensibilidad, la estabilidad postural, el tono muscular, cooperación, coordinación u otras alteraciones cognitivas. La apraxia es el resultado de una alteración de la corteza motora asociativa.
En concreto, la apraxia ideomotora es una forma de apraxia de las extremidades y denota una dificultad en la selección, secuenciación, y orientación espacial de los movimientos que involucran los actos gestuales. Cuanto más descontextualizada es la acción motora que se solicita al paciente más fácil es ponerla de manifiesto por lo cual la forma más fácil de evaluarla es con gestos que no comporten la utilización de objetos, mejorando a la imitación o con el objeto real. Por este motivo, aunque es la apraxia más frecuente produce menos interferencia en las actividades de la vida diaria, porque esos mismos gestos se realizan de forma automática correctamente en la vida diaria y con los objetos concretos (contextualización).
La evaluación de la apraxia se puede realizar «a pie de cama» o en una consulta general mediante la ejecución de gestos sin uso de objetos (gestos intransitivos) o con referencia a objetos (gestos transitivos).
La ejecución de gestos intransitivos puede ser mediante gestos simbólicos (santiguarse, saludar, saludo militar…) o la imitación de gestos arbitarios (pantomimas) como realizar un círculo con los dedos o hacer la mariposa con las dos manos.
La ejecución de gestos transitivos puede ser con gestos mímicos sin objeto real como clavar un clavo, lavarse los dientes o bien abrir una puerta con una llave o con gestos con objeto real como encender un mechero o encender una vela con una cerilla.
Las apraxias ideomotoras habitualmente son bilaterales salvo en dos circunstancias: la primera es lo que se denomina «apraxia ideomotora simpática» en los miembros izquierdos cuando existen grandes lesiones hemisféricas izquierda con importante hemiparesia derecha y afasia, lo que en realidad sería una apraxia bilateral pero que en el lado derecho no se puede manifestar por la paresia y la segunda circunstancia es la apraxia ideomotora por desconexión del cuerpo calloso, en la que se produce una desconexión del área promotora derecha respecto al hemisferio izquierdo, ocasionando un una apraxia focal en miembros izquierdos.
En otras entradas comentaré la rigidez paratónica y el trastorno frontal de la marcha.